Ya se va pasando la tormenta. Y parece que la mayoría de los españoles estamos de acuerdo en que se televise en La 2 la misa de los domingos. (La 2 es el segundo canal de la Televisión pública española).

Quiero añadir algunos comentarios. Es un servicio a la comunidad, a aquellos que lo deseen, como se dan otros acontecimientos y servicios.

Pero como creyente, sí que me parece interesante:

1. Que la misa vaya acompañada, siempre que se pueda con administrar la comunión a los que la están viendo. Podría ser acercarnos lo más posible a la celebración. Bastaría con que algún feligrés se encargase de acercar la forma a casa del enfermo.

2. No acabo de ver claro el que se transmita la eucaristía desde iglesias muy nobles, con ornamentos elegantes, con grandes coros... y ¿así es una demostración de arte? ¿No podría ser una eucaristía celebrada y transmitida desde comunidades pobres, sencillas, sin que se note que está preparada ese día para la tele?

3. No quiero confundir la misa que se ofrece para ancianos, enfermos con las misas de las fiestas. Hay muchas veces que sin fin pastoral, sino como propaganda se ofrece la filmación de las fiestas, misa incluida. Eso no lo entiendo. No me imagino a Jesús con la cámara grabando y transmitiendo.

4. Me choca tremendamente que en alguna cadena se ofrezca la misa, precedida de multitud de anuncios. Y como algo más se da la transmisión. Creo que requiere una preparación.

5. Por supuesto que me parece más celebrativa una eucaristía en comunidad, con presencia física, donde se pueda estar junto al hermano y darse la paz y contestar juntos.

6. Hay que aprovechar todos los adelantos y la tele puede ser uno muy valioso para acercar la homilía de la eucaristía a los que no pueden acudir al templo, pero me gustaría pasar de oír misa a celebrarla. Y para ello puede contribuir la forma de celebrarla y sobre todo el tipo de homilía, acomodada a personas débiles, ancianas, enfermas… ¿No sería bueno transmitir desde un hospital, residencia de ancianos, comunidad apropiada...?

7. Muchas personas tenían la costumbre de ir a la misa de la parroquia. Así les facilitamos un poco y les ayuda mucho en su espíritu. Gracias.

 

Gerardo Villar