Hermanos y hermanas, la Palabra nos recuerda que la vida no se reduce a actividad y trabajo; es un misterio más profundo que requiere consciencia y mirada nueva. Oremos.

Queremos cambiar nuestra mirada

• Que la Iglesia proclame la importancia de lo pequeño, lo oculto en lo visible, la fecundidad en la semilla, la gratuidad de la vida entregada a fondo perdido.

Queremos cambiar nuestra mirada

• Que en nuestras comunidades parroquiales y religiosas las relaciones sean humanizadoras, se valore las cosas pequeñas y los pequeños gestos.

Queremos cambiar nuestra mirada

• Que los creyentes sepamos vivir con hondura las ocasiones que se nos ofrecen aquí y ahora, por humildes y terrenas que nos parezca.

Queremos cambiar nuestra mirada

• Que todos nosotros y nosotras vivamos con confianza, paciencia y agradecimiento las situaciones oscuras de la vida y de la historia.

Queremos cambiar nuestra mirada

• Que sigamos viviendo con responsabilidad este tiempo de pandemia, cuidando unos de otros, pensando en los demás, teniendo en el horizonte la superación de este tiempo.

Queremos cambiar nuestra mirada

Padre Madre buena, queremos escuchar tu invitación a vivir poniendo un poco de felicidad en cada rincón de nuestro pequeño mundo diario. Te damos gracias por tu hijo Jesús, nuestro hermano y maestro.

Vicky Irigaray